jueves, agosto 17, 2006

"SÓLO SI HAY PAZ EN ORIENTE MEDIO habrá paz en el mundo: la paz en Oriente Medio es un bien imprescindible para la seguridad en el orden internacional, igual que la paz en Líbano", dijo ayer Zapatero.

Una de dos: o es una perogrullada o una memez. En el mejor de los casos, es una perogrullada: la paz en el mundo sólo es posible si hay paz en todos los puntos del planeta, y Oriente Medio es uno de ellos. Lógico, Einstein, porque si hay tiros en Oriente Medio no puede decirse que el planeta esté en paz.

Pero lo más probable es que se trate pura y simplemente de una memez: pensar que si se acaba el conflicto de Oriente Medio el planeta girará amablemente hacia un estado en el que las armas serán superfluas. Un mundo sencillo, lleno de flores y en el que los caramelos estarán a lado y lado del camino por el que, silbando, andaremos a recoger los frutos silvestres para el postre. Claro que, dejando de lado la espinosa cuestión de quién ataca a quién en Oriente Medio, en la que seguro que jamás nos pondríamos de acuerdo, se me ocurre solamente una pregunta: la violencia en el Congo, en Sri Lanka, en Eritrea y Somalia, en la selva colombiana, en tantos otros lugares, ¿también tiene que ver con lo que ocurre en Gaza o en el río Litani?