jueves, agosto 31, 2006

"ISRAEL ROMPE y Europa paga", todo un ejemplo de periodismo objetivo y equilibrado que debemos, una vez más, a la "moderada" La Vanguardia:
La Unión Europea mantiene una curiosa relación con Israel, por cuenta de las actuaciones de unos y otros en los territorios palestinos. El club comunitario y sus socios se pasan la vida construyendo y financiando infraestructuras de todo tipo en Gaza y Cisjordania. Pero de poco sirven sus esfuerzos, pues muy poco duran los resultados.

Como si fuera uno de esos niños a los que entusiasma arruinar de una patada los castillos de arena o estructuras de Lego que tanto trabajo han costado a su hermano menor o a su compañero más débil, el ejército de Israel lleva cinco años seguidos machacando sistemáticamente todo tipo de edificios e instalaciones construidos para los palestinos por distintos países y organizaciones. La diferencia es que aquí no se trata de un juego: tales operaciones de destrucción, unidas al aislamiento de las poblaciones afectadas, han llevado a la miseria y el desamparo a cientos de miles de personas.

[...] Ni la Comisión Europea ni los Veinticinco se plantean dejar de financiar proyectos palestinos ni mucho menos frenar su ayuda humanitaria a este pueblo, aunque la llegada de Hamas al gobierno sí llevó a suspender subvenciones directas al Ejecutivo de la Autoridad Nacional Palestina. En la Eurocámara y entre los estados miembros se levantan de vez en cuando algunas voces que claman contra el afán destructor de Israel. Pero la falta de unidad política y de criterio entre los socios en torno al conflicto de Oriente Medio se traduce en una tibieza y una debilidad tales respecto al Gobierno israelí, que la Unión Europea ni siquiera se atreve a sacar a la luz algunos demoledores informes de sus propios servicios sobre la trágica situación y las barbaridades cometidas en los territorios palestinos.
Me gustaría saber por qué razón el periodista no se atreve a sacar este tipo de barbaridades cometidas en los territorios palestinos. Observación retórica, por supuesto: el motivo es que esas barbaridades son cometidas por los propios palestinos, no por los israelíes.

Tomad nota de que esta diatriba no aparece en la sección de opinión, sino que está escrita por Fernando García, el corresponsal en Bruselas, y está en la sección de Internacional, donde en teoría la información debería ir separada de la opinión.

ACTUALIZACIÓN. Me había olvidado de poner el segundo enlace.